BRINDIS INTERBELLUM

Felices fiestas a todos,

suevos, vándalos y godos,

odiadores oficiales,

desarmados y cautivos,

críticos deconstructivos,

haters de redes sociales.

Al que plagia y no comparte

porque se le niega el arte

y lo roba con descaro,

al enclenque y al robusto,

al que reclama lo justo

y no pasa por el aro.

Al que pierde el imperdible,

al que cree que es infalible,

supermanes, Harry Potters,

al que omite y al que añade,

al pijo que estudia  “Ade”

con chalet en We are waters.

Al inculto y al pedante,

al prota y al figurante

del teatro de la vida,

al que pierde las apuestas,

al que miente en las encuestas,

al que perdona y olvida.

Al que ni suma ni sigue,

al que busca y no consigue,

al que discute sin ira,

al que se niega y resiste,

al que fracasa e insiste,

al que no le toca y tira.

Brinden borrachos y abstemios,

los soldados, los bohemios,

los ateos, los creyentes.

Que los dioses no hagan falta,

que la voz se escuche alta,

que haya más panes que dientes;

 y más príncipes que ranas;

más paisajes que ventanas

y abrazos de corolario.

Y sueños de carne y hueso

y, por cada boca, un beso

que detenga el calendario.

SALUD