Quién sabe,
mi vida,
por dónde andaré
el año que viene
o después
de este instante,
si apenas puedo saber
qué punto seguirá
a este coma
que me encama
a pesar de estar de pie.
Te has doctorado en consolar
mi desconsuelo
rozándome un dedo,
girando una llave.
Quién sabe, mi vida,
dónde andaré,
pero no iré solo,
lo sé,
y lo sabes.
1 comentario:
Es una preciosidad de poema para leer en tan señalada fecha.
Un saludo!
Publicar un comentario